El presidente chino, Hu Jintao, iniciará mañana una gira por Estados Unidos, Brasil, Venezuela y Chile, en la que el líder comunista busca limar tensiones con Washington y aumentar al máximo los lazos económicos y estratégicos con Brasilia, de cara a la consolidación de un bloque de potencias emergentes.Durante el viaje, primero del año para el presidente chino, Hu asistirá a dos importantes cumbres, la de Seguridad Nuclear que se celebrará en Washington los días 12 y 13 de abril y la II Cumbre del BRIC (Brasil, Rusia, India y China), del 15 al 16.
En la cumbre nuclear, China, potencia atómica firmante del Tratado de No Proliferación, defenderá ante los representantes de más de 40 naciones la necesidad de aumentar las medidas de seguridad para proteger estos armamentos.
"Existe el riesgo de que terroristas y organizaciones trafiquen con materiales nucleares o incluso los usen en ataques", destacó el viceministro de Asuntos Exteriores chino Cui Tiankai, en una rueda de prensa para presentar la gira.
Aunque la delegación china parece interesada en discutir sólo aspectos nucleares durante la estancia en Washington, lo cierto es que hay gran expectación ante la reunión bilateral que, en los márgenes de la cumbre, celebrará Hu con su homólogo estadounidense, Barack Obama.
Ello se debe al delicado momento que atraviesan las relaciones entre China y EEUU a todos los niveles, desde el económico (presiones de Washington para que Pekín revalúe el yuan) al militar (venta de armas estadounidenses a Taiwán) pasando por el político (reciente reunión entre el presidente norteamericano y el Dalai Lama) o el empresarial ("caso Google").
No obstante, Cui anticipó al respecto que las tensiones de los últimos meses podrían no ser un punto principal en la agenda de la reunión, ya que el pasado 2 de abril Hu y Obama conversaron telefónicamente y decidieron que ambos países "mantendrían el consenso en los asuntos clave".
Ello podría significar, según los analistas, que EEUU y China podrían aparcar sus diferencias y unirse para colaborar en los principales temas que preocupan a la comunidad internacional, tales como la crisis económica o el cambio climático.
El viaje a Brasil, que se inicia el 14 de abril, será igualmente importante para China, en su continua búsqueda de mercado y materias primas en Latinoamérica.
La cumbre de potencias emergentes en la capital brasileña se centrará también en temas como la crisis económica y el cambio climático, pero también en asuntos tan reclamados por el BRIC como la reforma de las instituciones financieras internacionales (FMI, Banco Mundial), en las que se ven insuficientemente representados.
"El BRIC representa un 15,5% del PIB mundial (...) y comparte similares posiciones en asuntos globales. Quiere un nuevo mecanismo de cooperación entre los países emergentes", destacó el viceministro Cui.
En el campo bilateral, Hu y su homólogo brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, presidirán la firma de numerosos acuerdos, entre ellos un plan de asociación de cinco años que aspira a cambiar la relación entre los gigantes asiático y latinoamericano.
Además, China y Brasil suscribirán acuerdos para el aumento de la cooperación espacial y concretarán el lanzamiento en 2011 del satélite conjunto "CBERS-3".
En energía, la segunda mayor petrolera china, Sinopec, y el Banco de Desarrollo de China firmarán acuerdos con la brasileña Petrobras para el aumento de la cooperación entre ambas partes, aunque los detalles se conocerán durante la visita.
Sinopec, por otro lado, ya ha expresado interés por los nuevos yacimientos descubiertos en la costa próxima a Sao Paulo.
La gira continuará los días 17 y 18 en Venezuela, otro tradicional aliado económico de China en Latinoamérica, y donde Hu también suscribirá acuerdos en los sectores de la energía, finanzas, cultura y alivio de la pobreza, entre otros campos.
Hu concluirá su aventura americana con una breve escala en Chile, el día 18, en la que mantendrá su primera reunión con el nuevo presidente chileno, Sebastián Piñera, y se espera que transmita su solidaridad hacia las víctimas del terremoto del 27 de febrero.
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