
Hay muchos interesados en explotar las olas de las costas chilenas, por lo que se prevee que en los próximos 3 a 5 años, Chile tendrá su primera planta instalada.
El precio de obtener energía del mar es uno de los más altos: entre 3 y 7 millones de dólares por MW, en el caso de la undimotriz. Con este precio, por el momento sólo puede competir con la eólica, cuyo costo varía entre los 2,5 y 3,5 millones por MW. Si bien, en el mundo ya se han desarrollado plantas mareomotrices desde hace más de 40 años, la mayoría ha sido a nivel de prototipo o con potencias muy bajas.
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