Un 98 por ciento de avance muestran a la fecha las obras de adecuación y mejoras al Museo Submarino O’Brien. Además, el alcalde de Valdivia adelantó que sólo falta el “visto bueno” de la Dirección de Obras Portuarias para retomar cuanto antes los recorridos al recinto, suspendidos desde el terremoto de febrero último.
Bernardo Berger se refirió esta mañana al estado del proyecto, uno de los más novedosos hoy en Chile en materia museológica, y el único en su tipo que aprovecha una ex nave de guerra para poner en valor la relación del país con el mar y su historia.
Desde el terremoto del 27 de febrero pasado, el museo submarino ha permanecido cerrado a público, debido a las dificultades de acceso por la destrucción de parte de la costanera.
“Sin embargo, como municipio no hemos querido perder el tiempo e iniciamos una serie de trabajos para mejorarlo, lo que permitirá avanzar en la visión global de este ambicioso proyecto”, puntualizó el jefe comunal.
Agregó que “con recursos que habíamos conseguido a principios de año del Fondo Regional para la local (FRIL) llamamos a una propuesta pública que permitió poner en marcha estas mejoras, que finalizarán esta semana”.
Los trabajos son ejecutados por la empresa Sociedad Comercializadora y Distribuidora MetChile Limitada, con una inversión de 38 millones 568 mil 566 pesos.
Estos recursos permitieron la adecuación de los accesos y sellado de los que no se ocuparán; pintura interior en 200 metros cuadrados de áreas que presentaban algún nivel de corrosión, y carpintería para reparar muebles defectuosos o en mal estado.
También se pudo avanzar en la construcción de 160 metros lineales de barandas en la superficie de la embarcación, para dar mayor seguridad a los visitantes; la adquisición e instalación de casetas de atención al visitante y de seguridad; y la pintura exterior del casco completo, incluida la vela.
El plazo de ejecución de los trabajos termina esta semana. En principio la entrega se había previsto para el 6 de julio, pero el mal tiempo y las lluvias demoraron la pintura exterior, que era lo último antes de finalizar.
Berger adelantó que apenas recepcione de forma definitiva estos trabajos, el municipio a través de su Corporación Cultural Municipal (CCM) -a cargo del desarrollo del proyecto museológico y de la administración– retomará los circuitos para los visitantes. Incluso indicó que ya hay listas de espera para conocer la nave.
Indicó que se ofició a la dirección de Obras Portuarias para que autorice el uso del muelle en el tramo en que se enclava el submarino O’Brien, tramo que, pese a que también sufrió daños, contaría con las condiciones estructurales necesarias para permitir el embarque de personas.
“De ser así, y si la recepción de los trabajos se cierra esta semana, estaríamos en condiciones de reabrir el museo al público a contar de la próxima semana”, anunció el alcalde.
“El municipio está expectante a la necesidad de recuperar cuanto antes la costanera, porque ello permitirá retomar temprano este año las visitas al Museo Submarino, cuya administración hemos encargado a la Corporación Cultural”, sentenció.
A juicio de Berger, el Museo Submarino se trata de un acertado proyecto que impulsó este municipio. “En su etapa de marcha blanca de apertura a público, mostró cifras más que positivas, que hacen vislumbrar la fuerza y acogida que tendrá este proyecto, una vez completado, en el turismo regional”.
Entre las estadísticas preliminares de su período de marcha blanca, en los 13 días que funcionó con visitas guiadas entre el 4 y el 26 de febrero, recibió a 1 mil 253 personas, de las cuales 679 eran hombres, y 574 mujeres, con un promedio de 100 personas diarias.
Respecto al origen de los visitantes, se recibieron personas nacionales entre Antofagasta y Chiloé, en tanto que entre los 12 extranjeros que llegaron, 5 fueron argentinos, 1de Costa Rica, 4 mexicanos y 2 franceses.
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