"Todavia falta el entrenamiento de hoy. Todavía la formación no la tengo resuelta. Suazo ha venido en los últimos días entrenando del mismo modo que sus compañeros, sin embargo se siente todavía la pausa que él hizo", tras su lesión, sostuvo.
Sobre el goleador chileno, Bielsa agregó que "no es que hayamos inventado la lesión". "Tambien es cierto que los tiempos de recuperación que se manejan no son los habituales", apuntó.
"El jugador ha entrenado los últimos tres días en plenitud. No ha retomado el estado de formas que tenía antes de lesionarse. Si está sano en los términos que puede asumir la tarea que puede asumir el resto de los jugadores que también están sanos", agregó.
Bielsa subrayó, empero, que "conceptualmente nunca arriesgaría a un jugador que está lesionado en ninguna competencia y por ningún motivo. Pero no es el caso de Suazo, que está sano".
Sobre Honduras, el primer rival de Chile en Sudáfrica, Bielsa afirmó que "tienen virtudes y debilidades, aunque no hay equipo que no pueda ser mirado bajo esa óptica".
"Ellos tienen jugadores de recursos muy valiosos", indicó.
Sobre las diferencias con el Bielsa que dirigió a la Argentina en el Mundial de Corea y Japón, el entrenador dijo que se siente "más viejo, ha pasado el tiempo".
"El tiempo empeora el carácter y la salud, estoy peor", deslizó.
Sobre la selección argentina, afirmó sentir "nostalgia".
"Pertenezco a mi país, todos mis lazos están activados", admitió.
Preguntado sobre el apodo de "Loco" que lleva a cuestas, Bielsa respondió sonriente que "es un significado por exageraciones" de su comportamiento. "El diccionario dice eso y del diccionario elegí lo más suave", deslizó.
Por otra parte, señaló que "no hay triunfalismo ni actitud exagerada", en relación a los anhelos de los deportistas de alcanzar al menos semifinales, como hizo parte del grupo en el Mundial Sub 20 de Canadá.
Bielsa agregó que todos los equipos llegan a estas citas deportivas con esperanzas y dijo estar seguro de que la selección chilena de 1998 hizo lo mismo. "Sé que no vinieron a participar".
Sin embargo, aseguró que "los partidos no se ganan hasta que se juegan", explicando que "hay que trabajar mucho para obtener triunfos".
Agregó que "los rivales son todos con dificultades, con nivel competitivo" y que "lo que se jugó hasta ahora (deja) una sensación de paridad".
"Pero a partir mañana (miércoles) tendremos la posibilidad de justificar o no a lo que aspiramos", reiteró.
En ese plano, sostuvo que no es posible dar ventajas, por lo cual no piensa cambiar ahora su esquema de juego ofensivo.
"Cuesta tanto dar forma a un estilo de juego, no es conveniente (modificarlo) cuando llego el momento de la verdad".
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