Políticos y autoridades deben analizar con seriedad la realidad del país, para no propiciar miradas distorsionadas sobre la sociedad y sus problemas.
EN LA DISCUSIÓN PUBLICA se ha instalado la idea de que existe un alto grado de "malestar" de los chilenos con la manera cómo funciona y está organizada la sociedad en que viven. Las manifestaciones callejeras de las últimas semanas han gatillado este debate y serían la expresión más concreta de dicho malestar, que también se vería confirmado por la desconfianza de las personas hacia las instituciones, según han medido diversas encuestas. Tal conclusión, que pretende ser un diagnóstico válido respecto de la sociedad chilena, parece requerir mejores explicaciones que las ofrecidas hasta ahora.
Se ha dicho que la tesis del malestar no se explica por la economía, que crece a buen ritmo, con un desempleo en descenso y una inflación controlada. Con todo, el fenómeno podría tener causas más allá de lo estrictamente económico, por lo que bien podría coexistir con un momento de relativa pujanza. Aún así, debería ser posible detectarlo, sobre todo si afecta a la sociedad entera, en otras estadísticas económicas, por ejemplo, en una mayor tendencia de las personas a proteger su patrimonio invirtiéndolo en divisas o sacándolo del país, o que disminuyera la disposición a invertir en Chile. Sería esperable, también, que el malestar se expresara en mayores tasas de emigración. De nada de esto hay indicios, sino más bien lo contrario. Por otro lado, mientras el discurso imperante promueve la educación estatal, en la práctica los chilenos prefieren los establecimientos educacionales subvencionados o privados (70%, según el CEP) y hacen el esfuerzo de matricular a sus hijos en universidades privadas.
Sobre todo, el malestar no se refleja en la satisfacción con su vida que tienen los chilenos. En la encuesta CEP conocida la semana pasada, un 77% dijo estar satisfecho o muy satisfecho con su "vida en general" (versus 62% en 1995), y un 67% con su trabajo (72% en 1995). Llama la atención que en esa misma encuesta la gente reprobara fuertemente el desempeño del gobierno y la clase política en general, pese a manifestar altos niveles de confianza respecto de su futuro personal. El diagnóstico del malestar, por ende, parece más bien reflejar las expectativas que, en una sociedad moderna, con mayores niveles de desarrollo y libertad, encuentran más canales de expresión. De ahí que parezcan fuera de lugar las comparaciones con fenómenos como las revueltas en Medio Oriente y el norte de Africa, o incluso, con la situación en algunos países de Europa que pasan por una profunda recesión, ambas realidades muy distintas a la chilena.
El mundo político tiene responsabilidad en alimentar expectativas poco realistas y en la consiguiente frustración. Y aunque Chile es un país donde persisten desigualdades que es preciso enfrentar, el gobierno contribuye a exacerbar demandas y a crear un clima que da pie para hablar de un supuesto malestar cuando insiste demasiado en su rol de corregir "injusticias" y, también, cuando muestra un mal manejo político de las demandas en educación y de los desmanes generados al alero de las marchas. Los políticos y las autoridades deben actuar con seriedad al proponer diagnósticos sobre la realidad del país, para no propiciar miradas distorsionadas sobre la sociedad y sus problemas. Parece curioso que en lugar de profundizar el análisis de un problema eventualmente acotado a aspectos de acceso, financiamiento y calidad de la educación, se tienda a buscar explicaciones que importan un cuestionamiento al orden social.
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ACLARACION: Este blog no es antiperuano ni nacionalista chileno. Este blog simplemente recopila y (a veces) comenta sobre artículos recopilados en la prensa nacional y mundial y que involucran a Chile. Si parece "cargado" hacia Perú, simplemente, es resultado de la publicación constante -y obsesiva- en ese país de artículos en que se relaciona a Chile. Así también, como ejemplo opuesto, no aparecen articulos argentinos, simplemente, porque en ese país no se publican notas frecuentes respecto Chile. Este blog también publica -de vez en cuando- artículos (peruanos o de medios internacionales) para desmitificar ciertas creencias peruanas -promovidas por medios de comunicación y políticos populistas de ese país- sobre que Perú ha superado el desarrollo chileno, lo que es usado en ese país para asegurar que Chile envidia a Perú y que por eso buscaría perjudicarlo. Es decir, se usa el mito de la superación peruana y la envidia, para incitar el odio antichileno en Perú.
CENTRAL DE INTELIGENCIA CHILENA DETEC!!!!!!!!!!!!!!!!!!!. Estos chilenos del aparato estatal desinformador son incurables. Insisten e insisten en sus mentiras, en sus cortinas de humo y pretenden que el publico en general no se dé cuenta de que Chile es una bomba de tiempo, con tantos años de silencio forzado, de vendas en los ojos y tantas reivindicaciones sociales sin respuesta.
ResponderBorrarhttp://www.facebook.com/andresvilches19?sk=wall
ResponderBorrarunance a esta pagina de facebook, esperamos sus aportes.
Que perdida de tiempo el articulo, estos wns juran que van a convencernos de que todo esta bien con analisis pobres como este, pero lo cierto es que gran parte del pais esta viviendo en carne propia los efectos nefastos de este sistema y estos intentos de opacamiento son ya inutiles.
ResponderBorrarCHILE ES UNA MENTIRA....
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