La "Mecedora de Torre Tagle" (la Cancillería peruana)

Colaboración de El Mago

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Los peruanos educados son simpáticos, caballeros; de buenos modales y hablar suave. Atienden bien, conversan con gracia y saben agradar. Su comida es rica y su trago es bueno, incluso su pisco sour es mejor que el nuestro. Sus diplomáticos, residentes en el Palacio de Torre Tagle, son fieles representantes de lo anterior.

Pero no nos confundamos, buenos modales no significa que concuerden con quienes son objeto de sus atenciones ni menos una señal de estima. Es un asunto de negocios, no es amor. Más aún, es parte de los “sedantes” con que adormecen a sus competidores, oponentes o adversarios, según corresponda. Los adormecen para hacer lo que quieren mientras el paciente sueña.

Una expresión de la “mecedora” es la política de “las cuerdas separadas” del Presidente García: estimulan nuestra codicia y nos ofrecen negocios como si fuéramos amigos y simultáneamente fabrican un pleito limítrofe marítimo como si fuéramos enemigos. Ellos ganan en los dos ámbitos: consiguen las inversiones que necesitan para su desarrollo y en el asunto de límites nos ponen ante una disyuntiva de perder – perder, ya que nosotros no podríamos ganar nada y ellos, en el peor de los casos, si no ganaran nada, tampoco perderían ni un metro cuadrado. La “mecedora de Torre Tagle”.

Hace algunos días, en medio de sus quejas y movidas internacionales para dejarnos mal ante la opinión pública internacional y ante la Corte de Justicia de La Haya, el embajador de Perú manifestaba a la prensa nacional que en su reunión con el Ministro de Defensa de Chile, junto con tratar su molestia y ofensa por el Ejercicio “Salitre” de la Fuerza Aérea, aprovechó para conversar sobre el apoyo que Chile le dará a la próxima campaña Antártica de su país. Sí, hemos sido fundamentales para que Perú consolide su presencia en la Antártica….y no cesaremos ayudarlos en ello. Estamos asegurándonos que a futuro puedan crearnos problemas en forma más eficiente, en un área geográfica a la cual no tenían acceso.

Y ello en medio de una trifulca militar generada por ellos.

Otra más de las varias de los últimos meses.

Mientras continúan con la majadería de “la carrera armamentista” y el ridículo “tratado de no agresión”.

La prensa de hoy 13 de octubre nos informa que “las FFAA de Perú consideran que el asunto del ejercicio “Salitre” no era tan importante”. ¿Qué tal?.

Después de dejar plantado a nuestro embajador y sus invitados ante el Monumento a O´Higgins y de no asistir a la celebración de nuestro aniversario patrio; después de haber “incendiado la pradera” con sus lamentos por el ejercicio “Salitre”; de haber sembrado la cizaña y generado conflictos entre nosotros mismos; de habernos malquistado con nuestros amigos; ahora resulta que el asunto no era tan importante y que todo sigue igual. La “mecedora de Torre Tagle”.

¿Es que alguien piensa que las FFAA peruanas han actuado por su cuenta?, o que no recibieron las invitaciones para ir a poner su ofrenda floral al monumento?.

No, el objetivo ya se obtuvo, Chile quedó en ridículo, fue forzado por EEUU y otros participantes a cambiar el libreto del ejercicio y a entrar en una pelea de dimes y diretes en la cual los peruanos se manejan, y ahora, ¡aquí no ha pasado nada!.

Más aún, Chile tiene la oportunidad de que Perú, generoso, acepte nuestra ayuda. Magnánimos ellos!.

Ya se les pasó el enojo y nos premian con la aceptación de nuestras invitaciones, ayudas y paseos.

Si los jueces de la Corte Internacional de Justicia, están leyendo en los diarios las alternativas de nuestra relación con Perú, deben estar mareados y confundidos. Ellos no pueden entender porque no están bajo el influjo de “la mecedora”.

Mientras tanto Chile, adormecido, sueña con la amistad chileno peruana y da gracias por tener la oportunidad de ayudarlos a crearnos nuevos y mayores problemas.

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