"La gente en general no conoce a sus vecinos inmediatos, un 60 por ciento de los encuestados nunca invita a los vecinos a las casas. Esto te habla de una sociedad que tiene un bajo capital social y eso en parte explica estas respuestas individualistas frente a situaciones de crisis", sostuvo en Lo Que Queda del Día.
"Llegamos al Bicentenario con un Chile que no parece tan unido o con un sentido de nación tan fuerte como podríamos pensar a primera vista", agregó.
Fuentes sostuvo que uno en las cifras del estudio "ve descontento, la manifestación de barreras sociales para el emprendimiento, la gente cree y tiene esperanzas en sí mismo en que superara la pobreza, pero hay una fuerte percepción de que hay muchas barreras estructurales que limitan las posibilidades de éxito".
Además, estas diferencias quedan más latentes cuando se analizan las respuestas de los capitalinos frente a los de regiones, ya que "en general la gente de regiones tiene una visión mucho más crítica respecto del centro del poder y respecto del nivel de integración".
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