Tras el empate 0-0 ante Portugal la víspera en Durban, el campeón mundial en 1994 sumó a sus dolores de cabeza los problemas físicos del volante central Felipe Melo y el mediapunta Julio Baptista, que están en duda para los octavos de final en el Ellis Park de Johannesburgo.
El médico del plantel, José Luiz Runco, señaló que Melo "tiene una torcedura en el tobillo izquierdo, está con dolores y dificultades para caminar. Eso nos preocupa bastante porque el tiempo para la recuperación es muy corto".
Melo debió salir del campo sobre el final del primer tiempo tras una dura entrada del luso Pepe y fue reemplazado por Josué. ¿Su tratamiento? "Básicamente es reposo", respondió Runco.
De hecho, el volante de la Juventus volvió al hotel en muletas, para no apoyar su pie y trabajó este sábado intensamente con los fisioterapeutas Luiz Alberto Rosan y Odir de Souza, señaló la Confederación Brasileña (CBF).
Por su lado, la 'Bestia' Baptista, reemplazante de Kaká, se marchó sobre el final por Ramires. El problema "es menos serio" al sufrir un golpe fuerte en su rodilla izquierda, aunque subrayó que "también preocupa".
En especial a Dunga, quien sabe que Melo es fundamental para su Brasil físico y táctico, con gotas de 'jogo bonito'. Ramires, su revelación durante la Copa Confederaciones-2009, podría tapar el probable hueco que deje Melo si no se recupera.
A esos dos jugadores hay que agregar las molestias que arrastran Elano por un golpe en una tibia, Robinho, que también fue dejado entre algodones ante el once de Cristiano Ronaldo, y Julio César, quien está jugando con dificultades lumbares, contra las que lucha desde un amistoso ante Zimbabue (victoria 3-0).
El portero del Inter de Milán ha trabajado a contrarreloj para estar a punto para el Mundial, pero utiliza un vendaje especial con metal que no está permitido por la FIFA, según la prensa brasileña.
Este sábado, la CBF minimizó este hecho revelado por el propio jugador, que se quedó en el hotel Fairway de la capital económica de Sudáfrica para intensificar los ejercicios de recuperación muscular de espalda.
En el caso de Robinho, sufre de un golpe en el muslo izquierdo contra Costa de Marfil y como los dolores musculares lo incomodaban, Dunga consultó a Runco y el médico le aconsejó darle descanso, pensando fundamentalmente en los octavos, "el partido más importante para nosotros" según el DT.
Con ese panorama, Dunga siente que su columna vertebral está 'tocada', herida.
Más teniendo en cuenta que su líder Kaká llegó a Sudáfrica tras una temporada plagada de lesiones (pubalgia especialmente) que le impidieron tener presencia activa en el Real Madrid y, encima, se perdió minutos en cancha ante Portugal.
El ex volante del Milan, de pálido debut ante Corea del Norte (2-1), fue expulsado contra Costa de Marfil (3-1), por lo que no pudo agregarle rodaje competitivo a sus piernas en Durban, lo que se podría sentir el lunes ante Chile, un equipo que hace presión en todos los sectores del campo y asfixia.
"Para ser campeón hay que estar en capacidad de vencer a todos", dijo el viernes Dunga.
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