“Es el Canal de Panamá del Cono Sur. Así lo llama mi tío (Eduardo), que es un enamorado del proyecto y fue el impulsor inicial y el motor de todo esto. Él tuvo la visión de pensar que el futuro estaba en la cuenca del Pacífico, el mundo está girando hacia allí, y nosotros no tenemos una salida eficiente para ese lado”. La definición parte de Hugo Eurnekian, vicepresidente de la Corporación América y presidente del holding Corredor Bioceánico Aconcagua, quien estuvo en Mendoza y definió claramente que no existe otro paso hacia Chile y el Pacífico que no sea a través de Mendoza, y que la intención de San Juan de convertirse en un paso necesario y no alternativo no tiene chance alguna de prosperar. Eurnekian es un joven empresario que hace años sigue los pasos de su tío, el poderoso armenio que supo hacer buenos negocios con el Estado argentino cuando Carlos Menem era presidente, y luego viró hacia el calor del kirchnerismo, del que es uno de los empresarios favoritos.
La iniciativa que estuvo promocionando Eurnekian es un paso interoceánico, el que implica la creación de un cruce ferroviario en la cordillera, que unirá Luján de Cuyo con Los Andes, en la Quinta Región del vecino país. “Para Corporación América es el proyecto emblema, al que más energía se le ha puesto. Por eso, ahora salimos a comentarlo, porque tenemos avances sólidos importantes para avanzar en su concreción. Ya se vislumbra la factibilidad, es cercana la posibilidad de que se concrete”, se entusiasma el titular del holding. El delfín de la corporación agrega que “la salida lógica es aquí, en Mendoza, no es en ningún otro lugar. El 70 por ciento del tráfico entre Chile y Argentina pasa por aquí. Y eso no es casual. En esta latitud, si vamos del Pacífico hacia el Atlántico, tenés Valparaíso y la Quinta Región, Santiago. Entre ellos juntan 50 por ciento de la población y del PBI chilenos y, del lado argentino, tenés Mendoza, San Luis, Córdoba, Rosario y Buenos Aires, que representan 60 por ciento de la población y del PBI”.
Eurnekian aporta que de ambos lados existen infraestructuras logísticas, todas las rutas, que complementan el proyecto “y todo confluye en Mendoza y el Cristo Redentor, no sólo desde Argentina y Chile, sino también desde Brasil y Uruguay. Arrancando desde San Pablo y terminando en Valparaíso, tenemos 70 por ciento del PBI sudamericano, es el corredor más importante del Mercosur, así que es muy fácil, el paso natural entre Argentina y Chile y entre el Mercosur y el Pacífico está acá, en Mendoza”. Con respecto al interés del gobernador sanjuanino, José Luis Gioja, de propiciar como salida al paso Agua Negra, Eurnekian no duda: “No es este paso o el de Agua Negra, a ver cuál hacemos, de ninguna manera. Ojalá el paso por San Juan se haga, pero son dos cosas que no compiten, no interfieren una con la otra. La cantidad de tráfico y demanda que hay para pasar por aquí son gigantescos.
Este paso es importantísimo y no va a dejar de serlo nunca”. Llevan 3 años trabajando en la propuesta, con una inversión de 25 millones de dólares. Ya conformaron un consorcio de empresas de primer nivel: Navieras, de Chile; Mitsubishi, de Japón; Contreras hermanos, de Argentina y Geodata, de Italia. Está calculado que en el 2012 se iniciaría la obra que demandaría 8 años de construcción. Incluirá un túnel de baja altura de 52 kilómetros, con operatividad durante todo el año que, garantiza, permitirá el cruce en 4 horas; un ferrocarril eléctrico que transportaría hasta 70 millones de toneladas por año; un sistema abierto de trocha única para todo tipo de carga; dos estaciones en los extremos que permitirán descargar mercaderías en todos los formatos, incluyendo camiones con su conductor. Obviamente, el proyecto incluye el transporte de pasajeros.
Artículo original
No hay comentarios.:
Publicar un comentario