Más aún, luego de que el Banco Central informara el viernes pasado que el Indice Mensual de Actividad Económica (Imacec) de diciembre de 2009, experimentó un alza de 3,9% en comparación con igual mes del año anterior, por encima del rango de mercado que apuntaba a un incremento de entre 2,5% y 3%. Incluso, dicha variación fue la mayor experimentada durante el ejercicio pasado.
En el techo de las estimaciones se ubicaba Alarcón, quien argumenta que la reactivación del sector industrial, uno de los más afectados por la crisis, será a una mayor velocidad que la prevista por algunos expertos, pues a su juicio la caída en los niveles de inventarios "fue tan profunda, que a las empresas no les queda otra que empezar a producir e invertir".
- ¿Cómo está viendo la evolución del escenario internacional y la caída en los mercados mundiales registrada a fines de la semana pasada?
- Era previsible que las turbulencias internacionales continuaran, ya que hay países que están muy endeudados, con déficit fiscales desastrosos, empezando por Estados Unidos, pero hay economías que además de esto poseen grandes inflexibilidades y donde el desarrollo de los últimos años ha estado básicamente dirigido por uno o dos sectores, lo que es altamente peligroso, tan peligroso como depender sólo de materias primas. El caso español es uno de los más claros por el boom inmobiliario, pero también está Portugal y Grecia. En contrapartida, la recuperación en algunos países ha sido más rápida de lo que muchos analistas pronosticaron y el gran desafío ahora, es mejorar el diseño de las políticas públicas.
- En el caso de Chile ¿qué reflejó el Imacec de diciembre?
- Que la recuperación ha sido muy rápida, pero además que ha tenido algunos ingredientes destacables. Uno, que la recesión del año pasado fue muy fuerte, principalmente en el primer semestre, lo que llevó a que las variables reaccionaran de la forma que vimos. Afortunadamente, la reacción en la tasa de desempleo no fue tan mala, lo que ayudó a suavizar el ciclo y otorgó una base para la recuperación. Por el lado de los stocks si uno analiza la caída en el último trimestre de 2009, ésta fue una de las más profundas en la historia y permite proyectar que la recuperación será rápida, ya que a las empresas no les queda otra que empezar a producir e invertir. De hecho, tendremos un contrapunto bastante notable: la inversión crecerá más que el consumo.
Expectativas para este año
- ¿Cuáles son sus proyecciones para este año a nivel de PIB?
- Sin duda creceremos este año por encima del PIB tendencial... sobre 5,5%. Y un punto destacable es que el crecimiento no será inflacionario y eso se notará principalmente en la primera parte del año. Hemos visto de alzas en las proyecciones de 0,7% a 1,1% en el primer semestre y eso radica básicamente en situaciones de volatilidad en el precio de los combustibles y del dólar. Además del Impuesto de Timbres y Estampillas.
- Entonces el dólar seguirá volátil desde su punto de vista...
- La volatilidad seguirá en los mercados internacionales. La nota de optimismo es que estas últimas turbulencias no significarán una nueva caída en la economía mundial como en 2009, probablemente esto se concentrará en algunos países europeos. Se trata de réplicas en economías asociadas a sobreendeudamiento.
Programa de Piñera y flexibilidad laboral
- ¿Cómo está viendo el impacto del programa de Piñera en la economía?
- La Alianza planteó durante mucho tiempo medidas que tienen que ver con el área microeconómica -como incentivos tributarios, mejoramiento de la eficiencia del Estado e impulso a la productividad- y espero que ahora se implementen dichas iniciativas. Otro de los temas donde hay que reforzar las políticas es en materia de innovación.
- A nivel laboral ¿Cómo espera que avance la discusión?
- Lamentablemente, en estas materias hay una enorme desconfianza y el problema es que las inflexibilidades laborales terminan perjudicando a las mayorías. Se requiere un gran esfuerzo de acercamiento, abordar primero los temas donde hay consensos e incluir en el diálogo a un mayor número de entidades sindicales.
- ¿Habría que considerar a otras agrupaciones como la Unión Nacional de Trabajadores (UNT)?
- Mientras más agrupaciones participen en la discusión mejor, lo importante es que no haya tabúes y que se aborden los temas con fluidez.
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