Tal como la conocemos, la restricción vehicular podría regir por última vez este año en el Gran Santiago.
Por ahora está previsto que la prohibición de circular por las calles de la capital para vehículos sin convertidor catalítico, con el fin de disminuir la contaminación ambiental -y que en días de preemergencia ambiental también se extiende a los catalíticos-, esté vigente entre el 1 de abril y el 31 de agosto próximos.
Pero antes, el 11 de marzo, debe asumir el gobierno de Sebastián Piñera, que tendrá que decidir si continúa o no con una medida que a estas alturas es calificada como "irrelevante" y "nula" por diversos expertos.
Esto se debe a que la proporción de vehículos con sello rojo, en relación al total del parque automotor, disminuye año tras año, debido a la masiva incorporación de modelos que sí están equipados con el convertidor catalítico. En el período 2001-2008, por ejemplo, los vehículos con sello rojo disminuyeron del 44 al 12% del parque total (ver infografía).
Según expertos en transportes, del Instituto Libertad y Desarrollo (LyD) -entidad de la cual están saliendo diversas autoridades del futuro gobierno- y el diputado electo Gustavo Hasbún (UDI), quien integrará la comisión de Transportes de la Cámara, la restricción debe ser eliminada.
Hasbún dice que lo más probable es que la medida continúe en 2010, pero que luego el Gobierno de Sebastián Piñera deberá introducir cambios que desincentiven el uso del automóvil.
"Este año es difícil (eliminar la restricción vehicular). Lo que hay que hacer es planificar para que, a partir de 2011, sea un mecanismo ante una necesidad especial -como en días con episodios críticos de contaminación- y no permanente, porque, tal como está ahora, tiene ningún sentido", dijo Hasbún.
En LyD también critican la eficacia de la medida como arma antipolución. Agregan que no debería adelantarse para marzo, como sucedía hasta 2008.
Louis de Grange, de la Universidad Diego Portales, añade que "la restricción a los autos no catalíticos tiene efecto nulo y no cumple su objetivo de descontaminar Santiago".
Juan Carlos Muñoz, de la Universidad Católica, tampoco la respalda: "No es una buena herramienta. Cada vez tenemos menos vehículos que están afectos a la restricción, porque la mayor parte son catalíticos".
Artículo original
dejense de joder y eliminenla de una vez, el efecto es nulo por la poca cantidad de autos sin convertidor.
ResponderBorraren ocaciones es buena la restriccion veicular pero demonos cuenta de quien el mayor orgasmo de contaminaccion si los veiculos que en la gran mayoria se maneja solo una hora o las famosas industrias o microbuses que operan la gran mayoria de los dias e incluso esas quemas ilegasles que se acen en las noches en algunos sectores bueno esta demas dar mayores comentarios digamos lo que digamos las munisipalidades les llega mas ingresos sacando parte a esos pobres obreros
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