Chile transparentará inversión social por US$35.600 millones anuales y su impacto

Gobierno impulsa iniciativa que permitirá conocer el gasto fiscal de cada uno de los 360 programas sociales y ver si son o no eficientes.

Más de US$ 35.600 millones destinó el gobierno para gasto social en el Presupuesto 2011, de los cuales el 43% irá a cubrir la red de protección del Estado. Hoy, sin embargo, no existe medición actualizada, ni pública sobre el desembolso y los beneficios efectivos de cada uno de los 340 programas sociales financiados por el Fisco desde su aplicación, y mucho menos sus falencias o aciertos.

Pero eso cambiará en los próximos tres meses, cuando el Ministerio de Planificación (Mideplan) dé a conocer el resultado del primer proceso de evaluación íntegra de cada uno de dichos programas. Ese proceso, que nunca antes se había hecho en la administración pública, transparentará el gasto fiscal que ellos demandan y si son eficientes.

Para ello, se creará el primer Banco Integrado de Programas Sociales. A partir de la información que ahí se contenga, las carteras responsables de cada programa podrán solicitar estudios de impacto, que les permitirán resolver si siguen o no con un programa, lo cambian o terminan. La primera entrega será en junio, con 272 programas analizados (80% del total).

El jefe de la Unidad de Monitoreo y Evaluación de Programas Sociales de Mideplan, Matías Claro, indicó que entre las novedades del Banco Integrado destaca la primera evaluación cualitativa y cuantitativa de los dos grandes sistemas de protección social del Estado: Chile Solidario ( ayuda a los hogares indigentes) y Chile Crece Contigo (apoyo a las madres y niños más vulnerables). Estos son los subsistemas de ayuda de los cuales se debieran apalancar las reformas sociales más relevantes que impulsa el gobierno de Sebastián Piñera. En el primer caso, la instalación del Ingreso Etico Familiar de $ 250 mil para los hogares más pobres. En el segundo, la extensión del beneficio de posnatal desde 12 semanas a 24 semanas.

Claro precisó que las evaluaciones implican un detallado análisis de cada programa, según unas 30 categorías que abarcan ciclo de vida, tipo de beneficio, tipo de programa, nivel de vulnerabilidad, duplicidad de funciones, gastos efectivos, gastos administrativos, entre otros. Para eso, Mideplan, que posee 66 programas, trabaja con los otros cuatro ministerios sectoriales que también los tienen: Educación (162 programas), Trabajo (33), Salud (25) y Vivienda (11). Además, ha trabajado con otras carteras para ver otros 43 programas, como el de seguridad ciudadana (Interior) y Prodemu.

Al resultado de cada evaluación se le aplicará una metodología de monitoreo que contempla ponderaciones para cuatro ítemes globales de análisis: objetivo, focalización y medición y logro de resultados, cada una con un valor de 20%, y gasto social efectivo, la más cuantiosa, con 40%. Toda la información estará en una Ficha de Monitoreo, que acompañará a cada una de las 340 evaluaciones y será pública. El proceso se conocerá mañana en un seminario organizado por Mideplan y el Centro de Políticas Públicas de la UC.

El caso de Fosis

A la fecha, el equipo a cargo del trabajo, compuesto por 27 profesionales, tiene 60 programas con su evaluación concluida. Una institución que fue analizada es el Fondo de Solidaridad e Inversión Social (Fosis), dependiente de Mideplan, cuyo presupuesto 2010 era de $ 39.382 millones y finalmente demandó $ 51.849 millones. En esa entidad, el gasto social efectivo bajó entre 2009 y 2010, pasando desde 67% a 65,6% respecto de su presupuesto total. Los gastos administrativos subieron de 33% a 34,4% entre un año y otro. Uno de los programas más relevantes de Fosis es el Programa Puente. En su evaluación se concluye que mientras su gasto social efectivo ha pasado desde un 59,9% del total presupuestado en 2008, a 51,7% en 2009 y 54,7% en 2010, el gasto administrativo ha sido el factor contraproducente: en 2008 llegaba al 40,1% del total presupuestado, en 2009 al 48,3% y en 2010 al 45,3%.

Artículo original