Chile es el primer productor mundial de litio y escasamente en el país se han realizado investigaciones en torno a este mineral, aunque es un insumo básico en una industria que promete: la de los automóviles eléctricos.
En la ceremonia de presentación de los proyectos Fondef adjudicados por la Universidad de Chile, Flores aseguró que el conocimiento es importante, pero que el talento no es suficiente si se queda en la universidades y agregó que Chile está obligado a exportar "productos del conocimiento", pero no "conocimiento puro".
"En esta ola de cambios que han provocado las nuevas tecnologías, los países chicos deben estar preparados para generar negocios en los nuevos nichos que se están creando. Y debemos hacerlo a tiempo para convertirnos en proveedores de productos y no en simples consumidores", afirmó.
El nuevo asesor presidencial en materias de innovación estuvo de visita en Israel y comentó que ese país, con una población productiva que no supera los cinco millones de personas, ha logrado relacionarse efectivamente con Silicon Valley y hoy el 80% del financiamiento para proyectos innovadores viene de ese mercado.
Detalló que en Chile es necesario crear un ecosistema de innovación, como el que existe en Israel y que está basado en cinco variables: capital financiero, capital de conocimiento, capital humano, capital social y capital emprendedor. Esto último, agregó Flores, es el más difícil de lograr, pues tiene que ver con personas capaces de ver lo que nadie más y crear una organización social, porque no pueden avanzar solos, e inventar colaboradores y clientes, además de desarticular al adversario.
"Nuestros emprendedores e investigadores deben aprender a relacionarse con los capitalistas de riesgo y tener claro que no son los únicos que están en los temas. Deben tener en cuenta que sus proyectos pueden ser una contribución o una amenaza para otros y aprender a relacionarse con las personas y empresas indicadas", detalló el ex senador.
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