Así lo estiman en las comunas playeras. Esperan a miles de mendocinos. La cifra es similar a la temporada pasada.Las playas de la V Región de Chile esperan recibir en las vacaciones de verano 2010 a unos 200.000 argentinos.
Así lo estima Gabriel González, presidente de la Cámara de Turismo de Viña del Mar, quien no pudo precisar la cantidad de mendocinos que serán de la partida. Sin embargo, sospecha que “seguramente, como en otras oportunidades”, se tratará de miles de provincianos.
La cifra de turistas argentinos –cuyos orígenes son difíciles de determinar por la diversidad de puntos y modalidades de ingresos que tiene el país trasandino– es similar a la de la temporada estival 2009, dice González. De hecho –y tal como sucedió en enero y febrero pasados–, el empresario está convencido de que la costa chilena será más atractiva que la del Atlántico y Brasil, “porque nuestros precios están más competitivos”.
El ingreso de argentinos a través del paso cordillerano Los Libertadores comenzó a incrementarse ayer, pero se espera que el grueso se haga notar a partir de mañana y hasta el jueves. Son, además de los turistas de inicio de la temporada, aquellos que eligen pasar la noche de Año Nuevo en la costa para presenciar el ya tradicional espectáculo de fuegos artificiales que se realiza apenas el reloj marca la hora 0 del 1 de enero. Ayer, el nivel de ocupación en los hoteles de Viña era de 35%, mientras que la reserva para el 31 rondaba 75% y 80%, informó González.
El show –llamado Noche de Año Nuevo en el Mar– lleva unos 50 años. Inicialmente se realizaba en Valparaíso, hace un lustro se sumó Viña del Mar y ahora incluye a Concón. De esta forma, a lo largo de 17 kilómetros de costa hay 18 puntos de lanzamiento de unas 27.000 bombas de fuegos artificiales, durante 23 minutos, con el Pacífico de fondo.
En la Oficina Central de Turismo de Viña del Mar no pudieron prever cuántos podrían ser los turistas –en particular mendocinos– que recibirán 2010 en esa comuna. Sin embargo, arriesgaron que en esta oportunidad podría haber un incremento con relación a otros años: en esta oportunidad, el 1 de enero cae viernes, por lo cual se convierte en un fin de semana largo, que incluye el jueves, como día para viajar e iniciar en la noche la celebración (cuatro jornadas de minivacaciones).
Hotelería, congelada
“Para este año que empieza esperamos una cantidad similar al verano pasado, porque los precios son muy convenientes para los argentinos, sobre todo la hotelería: fueron fijados en mayo o abril con un dólar a $580, mientras que hoy está a $510”, expuso González. Así, aseguró que los paquetes están cerrados desde hace varios meses, por lo que es posible encontrar hoteles de dos estrellas a partir de U$S50, de tres estrellas desde los U$S70 y de cuatro con una base de U$S90.
“Los precios en general, como la tecnología y los accesorios de autos, están más o menos iguales que en la temporada pasada –agregó–. Lo que aumentó un poco es la gastronomía: comer en un restorán puede salir entre 10% y 20% más caro que en Argentina. Por ejemplo, hay menúes de U$S5$ a U$S10”.
Finalmente, aclaró que la nafta está más cara que en Argentina: U$S1 el litro. Pero el diésel es más económico, aunque más difícil de conseguir: U$S 0,80.
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