Los presidentes de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, y de Chile, Michelle Bachelet, firmaron acuerdos comerciales en el marco de una visita a Sao Paulo, en la que promovieron la instalación de un corredor interoceánico y la búsqueda de oportunidades en tiempo de crisis."Espero que perciban (los empresarios) que la diversificación de nuestras inversiones, la diversificación de nuestros comercios, la diversificación de nuestros productos y la diversificación de nuestros socios es una gran garantía contra la crisis" económica mundial, sostuvo Lula durante la ceremonia de cierre del encuentro empresarial.
"Esta crisis abre la oportunidad para Chile y para Brasil, y para América Latina y para países pobres" de que "las chances de mejorar sean mayores", agregó. Por ello, "Brasil y Chile deben seguir determinados a hacer del comercio y las inversiones un factor de desarrollo", destacó Lula.
De su lado, Bachelet hizo hincapié en la idea de "mirar a la crisis como una oportunidad" para que los países en desarrollo se abran un espacio para influir en los cambios futuros.
Dado que Chile es el mayor inversor latinoamericano en Brasil y el gigante sudamericano es el cuarto socio comercial chileno, todavía "hay mucho espacio para la inversión extranjera", sostuvo el ministro chileno de economía, Hugo Lavados Montes, quien recordó que su país dispone de múltiples acuerdos de libre comercio con otras naciones.
Los intercambios comerciales entre ambos países alcanzaron el año pasado un récord de 8.800 millones de dólares.
Otra propuesta respaldada por las autoridades chilenas y brasileñas presentes en el encuentro fue la construcción de un corredor interoceánico, que comunicará Arica e Iquique en el norte de Chile con el puerto de Santos, en el estado de Sao Paulo (sur).
Este corredor "ayudará a desarrollar mercados e intercambios del interior de nuestro continente. (...) Aumentará, particularmente, el flujo de personas y mercaderías entre nuestros países", destacó Lula al señalar que la infraestructura física del proyecto está avanzando "a pasos decididos".
Ambos países también instalaron una Comisión Bilateral que será presidida por sus cancilleres y que busca impulsar el comercio y la inversión.
Entre los acuerdos firmados se destaca además uno sobre servicios aéreos, que promueve la incorporación de nuevas frecuencias para pasajeros y de carga con el objetivo de fomentar la industria turística, sector de importancia para ambos países.
También establecieron acuerdos en el terreno de la previsión social, para brasileños y chilenos que viven y trabajan en el otro país; y entre la secretaría impositiva brasileña y la aduana chilena para agilizar los trámites aduaneros de mercaderías comercializadas.
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