Caso Karadima: Alto funcionario del Arzobispado declara ser testigo de conductas impropias

Hans Kast, canciller del Arzobispado de Santiago y ex feligrés de la iglesia El Bosque, testificó a comienzos de esta semana, ante el fiscal Xavier Armendáriz, que fue testigo de dichos actos con adultos jóvenes.

El sacerdote Hans Kast (49), canciller del Arzobispado de Santiago e integrante del Gobierno Eclesiástico, declaró a comienzos de semana ante el fiscal jefe de la Fiscalía Oriente, Xavier Armendáriz. En su testimonio afirma haber sido testigo de conductas impropias cometidas por parte del ex párroco de la iglesia de El Bosque, Fernando Karadima.

Kast no es un desconocido para el sacerdote de 79 años, denunciado ante la fiscalía por presuntos abusos sexuales, e indagado eclesiásticamente por el promotor de justicia, sacerdote Fermín Donoso.

El hermano mayor del diputado José Antonio Kast es una de las casi 50 vocaciones sacerdotales atribuidas a Karadima, a quien conoció hacia 1978 como feligrés de la parroquia de Providencia. También fue notario en la primera etapa de la indagación eclesiástica seguida al religioso desde 2005, y en esa condición dejó constancia de los primeros testimonios que lo acusan. Kast fue citado a declarar en la causa penal y, según afirman fuentes cercanas a la indagación, testificó haber observado al sacerdote incurrir en conductas impropias con adultos jóvenes. Según fuentes ligadas al caso, si estos corresponden a mayores de edad, no habría delito.

En la oportunidad, agregaron fuentes próximas al caso, Kast declaró brevemente, y al final de su testimonio entregó al fiscal dos documentos: uno con la opinión de un profesional sobre cómo piensan los acosadores, y otro con su visión de lo que ocurría en el entorno del religioso investigado.

Entre las situaciones de las que Kast menciona haber sido testigo, sostienen las fuentes, está la cercanía de Karadima con adultos jóvenes, quienes lo acompañaban a su pieza.

Las fuentes añaden que Kast declaró que las denuncias en contra de Fernando Karadima le parecen veraces, que califica su personalidad como "posesiva" y que dice que sus actos no estaban a la altura de su investidura.

Sanción eclesiástica

La declaración de Kast en la arista penal se produce en un momento particular para Karadima en la otra investigación de la que es objeto: la eclesiástica. En ésta, el promotor Fermín Donoso informó a la defensa del ex párroco que tiene hasta el 19 de mayo para entregar sus descargos respecto de las acusaciones que se le han formulado. Una vez recibidos esos antecedentes redactará su informe final al cardenal Francisco Javier Errázuriz, que incluirá una propuesta de sanción que el cardenal puede aceptar o modificar.

En esta indagación hay al menos siete denunciantes que describen situaciones de presuntos abusos por parte del sacerdote, además de numerosos testigos, afirman fuentes ligadas al caso.

El ex feligrés de El Bosque, F.G., prestó testimonio la semana pasada ante Donoso, a quien entregó un nuevo antecedente. Dijo a La Tercera que "en 1983 ó 1984" un grupo de jóvenes que había pasado por la parroquia envió una carta al entonces arzobispo de Santiago, Juan Francisco Fresno, "haciéndole saber de los actos cometidos por Karadima. Los que firmábamos debemos haber sido seis". Esta correspondería a la primera denuncia interpuesta en contra del sacerdote ante la Iglesia.

De acuerdo a fuentes ligadas a esta causa, en vista del cúmulo de antecedentes reunidos, el promotor de justicia evalúa proponer al cardenal que Karadima sea reducido al estado laical. Es decir, que pierda sus facultades como sacerdote.

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