Siempre he pensado que Chile es un país diferente, poblado por gente sobria, tranquila y reflexiva. Una nación de poetas y pensadores que aman profundamente su tierra.
No aspiramos a ser poderosos, pues nuestro tamaño y riqueza material no lo permiten; bien lo sabemos. Pero de la misma manera que lo hicieron nuestros antiguos ancestros, valoramos nuestra cultura pues se trata de una herencia mucho más valiosa que cualquier bien físico o material. Hemos recibido a través del tiempo unos valores espirituales y sociales que son la base fundamental sobre la cual descansa la paz que se respira al interior de las fronteras nacionales, un don superior a cualquier abundancia meramente económica.
Nuestros líderes son individuos que meditan los temas antes de dar una opinión, antes de actuar. En Chile se prefiere y privilegia el pensamiento antes que la acción irreflexiva, la responsabilidad permanente antes que los "caudillismos" sin sentido y de corta duración. No somos unos radicales que demandan de las instituciones cosas imposibles de conseguir; no somos como esos irresponsables que cuando las consecuencias de sus actos son negativas, lo primero que hacen es pedir una amnistía general.
Un Estado sin la influencia temperante de la cultura está condenado a la brutalidad, y al uso de la fuerza para lograr los designios de aquellos que ostentan el poder. A medida que este paradigma negativo avanza por el continente americano - desde el extremo norte hasta el sur -, veo con desconcierto como la sociedad se va transformando en un ente impersonal que no se guía por sentimientos humanistas en su más profunda acepción, y que claudica inmensos espacios de libertad todos los días. Pero Chile sigue siendo una gloriosa excepción.
Son muchos los gobernantes y gobiernos americanos que se han transformado en verdaderos imperios autónomos, alejados de las necesidades sociales de la población y cultivando sólo una glorificación personal y material. No en Chile, sin embargo. Las mujeres y hombres que guían los destinos de la nación han puesto y ponen, el espíritu y el intelecto al servicio de la gente. Es un ferviente deseo que esto siga siendo así. Sobriamente.
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ACLARACION: Este blog no es antiperuano ni nacionalista chileno. Este blog simplemente recopila y (a veces) comenta sobre artículos recopilados en la prensa nacional y mundial y que involucran a Chile. Si parece "cargado" hacia Perú, simplemente, es resultado de la publicación constante -y obsesiva- en ese país de artículos en que se relaciona a Chile. Así también, como ejemplo opuesto, no aparecen articulos argentinos, simplemente, porque en ese país no se publican notas frecuentes respecto Chile. Este blog también publica -de vez en cuando- artículos (peruanos o de medios internacionales) para desmitificar ciertas creencias peruanas -promovidas por medios de comunicación y políticos populistas de ese país- sobre que Perú ha superado el desarrollo chileno, lo que es usado en ese país para asegurar que Chile envidia a Perú y que por eso buscaría perjudicarlo. Es decir, se usa el mito de la superación peruana y la envidia, para incitar el odio antichileno en Perú.
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