Por Fernando Rospigliosi, analista político y Ex ministro del Interior de Perú
Un escenario aterrador es el de la segunda vuelta peruana. Dos candidatos populistas, uno que hizo un gobierno desastroso y otro que augura uno funesto, disputarán los comicios del 28 de mayo.
La candidata de centro derecha, Lourdes Flores, que encabezó durante meses las encuestas, cometió todos los errores imaginables en su campaña y al final, igual que en el 2001, perdió el segundo lugar por menos de un punto porcentual frente a Alan García. En cualquier país razonable quedaría descalificada para una nueva postulación. En el Perú, donde ocurren cosas asombrosas, nada se puede descartar en el futuro.
La primera encuesta publicada ayer otorga 43% a Alan García y 37% a Ollanta Humala. Un 20% todavía no define su voto. Pero la campaña recién ha empezado esta semana y muchas cosas pueden ocurrir.
Se trata de una típica segunda vuelta en que muchísimos electores votarán por el menos malo. Ambos candidatos tienen enormes resistencias. Ganará el que logre vencer o neutralizar esas resistencias.
Hasta la primera vuelta, lo que mostraban las encuestas era que el candidato que más rechazo tenía entre los más de 20 competidores era Alan García. Su gobierno de 1985-90 se caracterizó por una descomunal hiperinflación que empobreció a la mayoría; una política populista, proteccionista y de subsidios que produjo escasez crónica de productos básicos y un floreciente mercado negro; un aumento del terrorismo que empezó a atacar las ciudades, con bombas indiscriminadas que mataron a decenas de personas; flagrantes violaciones de los derechos humanos cometidas por las fuerzas de seguridad, apañadas por el gobierno; corrupción generalizada, desde el más alto nivel hasta el más pequeño.
Pero García es un orador formidable, un demagogo extraordinario. En campaña electoral es un rival temible. A pesar de eso, no pudo vencer las resistencias que tenía y subió sólo de 22% al 24% que obtuvo al final. Sólo la torpeza de Lourdes Flores, que cayó de 37% a fines de enero al 23% que hoy tiene, le permitió llegar a la segunda vuelta.
El rechazo a Ollanta Humala creció mucho en las últimas semanas. A las muy verosímiles acusaciones de violaciones a los derechos humanos que surgieron a principios de año se han sumado otras. Los verdaderos operadores de su campaña son militares en retiro (coroneles, comandantes) que trabajaron muy cerca de los generales montesinistas que hoy están presos por corrupción.
Era natural que eso ocurriera. Humala confía realmente sólo en los militares y en su familia cercana. Pero la revelación de ese hecho, realizada por cuatro o cinco de los más reputados periodistas de investigación del Perú, de varios medios distintos, ha hecho mella en su aura de luchador contra la corrupción.
Los exabruptos de su mentor Hugo Chávez tampoco lo ayudan. Y ahora se le suma el refuerzo de su otro amigo, Evo Morales, que ataca al gobierno peruano por el delito de haber suscrito un Tratado de Libre Comercio con los EE.UU.
La estrategia de Humala es obvia ahora. Trata desesperadamente de correrse a la derecha. Ha visitado al ultraconservador cardenal del Opus Dei Juan Luis Cipriani, al anciano líder aprista Armando Villanueva y a cuanto empresario acepte reunirse con él. Quiere "blanquearse", aparecer como moderado y razonable. No obstante, varios de los fracasados dirigentes de las izquierdas marxistas -no alcanzaron el 1%-, están corriendo desesperados a subirse al vehículo de Humala.
García, entre tanto, puede seguir siendo populista, confiando en que la derecha votará por él ante una amenaza mayor. Ha rechazado la alianza propuesta por el escritor Mario Vargas Llosa entre el Apra y los socialcristianos de Lourdes Flores. No le falta razón. Sería vista como una unión de los detestados "políticos tradicionales".
Así las cosas, el resultado electoral es todavía impredecible. Lo único previsible es que al Perú no le irá muy bien los próximos cinco años.
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ACLARACION: Este blog no es antiperuano ni nacionalista chileno. Este blog simplemente recopila y (a veces) comenta sobre artículos recopilados en la prensa nacional y mundial y que involucran a Chile. Si parece "cargado" hacia Perú, simplemente, es resultado de la publicación constante -y obsesiva- en ese país de artículos en que se relaciona a Chile. Así también, como ejemplo opuesto, no aparecen articulos argentinos, simplemente, porque en ese país no se publican notas frecuentes respecto Chile. Este blog también publica -de vez en cuando- artículos (peruanos o de medios internacionales) para desmitificar ciertas creencias peruanas -promovidas por medios de comunicación y políticos populistas de ese país- sobre que Perú ha superado el desarrollo chileno, lo que es usado en ese país para asegurar que Chile envidia a Perú y que por eso buscaría perjudicarlo. Es decir, se usa el mito de la superación peruana y la envidia, para incitar el odio antichileno en Perú.
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