A sólo diez días de la segunda vuelta de los comicios presidenciales, los chilenos viven ajenos a una campaña electoral carente de grandes actos, promesas y declaraciones, pero en la que se pelea voto a voto, según los analistas.
La campaña electoral pasa inadvertida en la capital, de donde se han retirado la mayor parte de los carteles que inundaron las calles semanas antes del 13 de diciembre, cuando se celebraron las elecciones parlamentarias y la primera vuelta de los comicios presidenciales.
Dos de los cuatro aspirantes a suceder a Michelle Bachelet que compitieron en la primera ronda, Sebastián Piñera, representante de la derecha, y Eduardo Frei, candidato de la gobernante Concertación, se volverán a medir en la urnas el próximo domingo 17.
"Ésta no es una elección de calle, es una elección que se discute en cada mesa de familia todos los domingos", señaló a Efe el analista Santiago Escobar, quien recalcó que estos comicios "tienen un dramatismo fuerte, porque van a ser de llegada estrecha", en alusión a las previsiones que apuntan a que la diferencia entre ambos será reducida.
"La campaña ha sido ampliamente cubierta por los medios de comunicación, pero es cierto que no se ha visto reflejada en un despliegue territorial y de propaganda en las calles", dijo a Efe Mauricio Morales, director del Observatorio Electoral de la Universidad Diego Portales.
Piñera, que logró un 44,05% de los votos, figura como favorito en las encuestas, mientras que Frei, con un 29,67% de apoyo en primera vuelta, no logra capitalizar la popularidad que ha alcanzado Bachelet, que ha llegado a una valoración récord del 81%.
"Hoy día los candidatos se están preocupando de mantener su base de apoyo, en el caso de Piñera, y de sumar lo más que pueda, en el caso de Frei", recalcó el politólogo Mauricio Morales.
"Si bien no ha habido actos masivos, las estrategias de campaña han estado orientadas fundamentalmente a captar adhesiones muy significativas", subrayó este analista.
Frei, ex presidente (1994-2000), senador democristiano y miembro de la coalición de centro izquierda en el poder desde hace 20 años, cuenta con el apoyo de la izquierda extraparlamentaria, que en la primera vuelta obtuvo un 6,21% con Jorge Arrate como candidato.
La clave está, según la mayoría de los analistas, en la decisión que tome ese 20,13% que el 13 de diciembre sufragaron a favor de Marco Enríquez-Ominami, un diputado salido de las filas de la Concertación que también atrajo a sectores moderados.
Esto añade una elevada dosis de incertidumbre a unas elecciones que pueden poner fin a veinte años en el poder de la Concertación y dar paso al primer gobierno de derecha en el país tras la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990).
"Como es una pelea voto a voto, en vez de actos masivos los candidatos han optado por un trabajo continuo permanente sobre el terreno que les permite estar en muchas partes y no desgastarse en grandes concentraciones", explicó Escobar.
El analista también atribuyó este fenómeno a la nueva ley que limita el gasto electoral, aprobada en esta legislatura, que "ha hecho que hayan menos recursos legalmente disponibles para ser usados en la campaña".
Las fiestas navideñas, el calor del verano (austral) y el inicio de las vacaciones han vaciado las ciudades y han contribuido a enfriar la contienda electoral.
La campaña de esta segunda vuelta también ha carecido tanto de grandes promesas y declaraciones como de escenarios para llevarlas a cabo.
Así, si en la primera vuelta se celebraron cuatro debates televisivos, para la segunda sólo se ha organizado una confrontación ante las cámaras entre los dos candidatos, que se realizará el próximo lunes 11, seis días antes de la prueba final.
En Chile, donde el voto es obligatorio para todos los ciudadanos que previamente se han inscrito en el registro electoral, casi no hay campañas institucionales llamando a ejercer el derecho al sufragio, y el padrón de votantes, que actualmente asciende a 8,2 millones, apenas ha registrado variaciones significativas en los últimos años.
Artículo original
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
ACLARACION: Este blog no es antiperuano ni nacionalista chileno. Este blog simplemente recopila y (a veces) comenta sobre artículos recopilados en la prensa nacional y mundial y que involucran a Chile. Si parece "cargado" hacia Perú, simplemente, es resultado de la publicación constante -y obsesiva- en ese país de artículos en que se relaciona a Chile. Así también, como ejemplo opuesto, no aparecen articulos argentinos, simplemente, porque en ese país no se publican notas frecuentes respecto Chile. Este blog también publica -de vez en cuando- artículos (peruanos o de medios internacionales) para desmitificar ciertas creencias peruanas -promovidas por medios de comunicación y políticos populistas de ese país- sobre que Perú ha superado el desarrollo chileno, lo que es usado en ese país para asegurar que Chile envidia a Perú y que por eso buscaría perjudicarlo. Es decir, se usa el mito de la superación peruana y la envidia, para incitar el odio antichileno en Perú.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario