Con el comienzo del nuevo año se cumplen seis años de la puesta en marcha del Tratado de Libre Comercio (TLC) entre Chile y Estados Unidos, acuerdo firmado el 6 de junio de 2003 y vigente desde el 1 de enero de 2004.Durante este periodo, el comercio de bienes entre ambos países ha presentado una tendencia creciente, al punto que desde la entrada en vigencia del TLC, el intercambio comercial bilateral acumula un crecimiento de 23,4 por ciento anual.
Dicho comportamiento se debe, en gran parte, al fuerte aumento de las importaciones, las que presentan tasas de crecimiento anuales por sobre el 30 por ciento en los dos últimos años, mientras que las exportaciones acumulan un crecimiento de 15,9 por ciento anual en el periodo 2001-2008.
Según el director general de Relaciones Económicas Internacionales, Carlos Furche, a pesar de la crisis mundial, en 2008 el intercambio comercial entre Chile y Estados Unidos aumentó 19,2 por ciento respecto al año anterior, totalizando alrededor de 20.000 millones de dólares.
Furche manifestó que la crisis mundial en la actividad económica norteamericana ha repercutido en el comercio que posee este país con el resto del mundo, en donde Chile no ha sido la excepción.
Sin embargo, si se habla de las exportaciones locales, exceptuando el cobre, Estados Unidos es el primer mercado de destino para Chile, ubicándose por delante de China, el primer socio comercial del país sudamericano en términos globales.
"Cuando se excluyen las exportaciones de cobre del análisis, se aprecia que la participación de Estados Unidos en el total de no cobre enviado por nuestro país aumenta casi un 16 por ciento, convirtiéndose en nuestro principal mercado de este tipo de productos", afirmó Furche.
Esta información es relevante, dado que la canasta de productos no cobre presenta un grado de diversificación mucho mayor, "como también un mayor valor agregado y encadenamiento productivo para nuestro país", agregó Furche.
EL TRATADO DE LIBRE COMERCIO
El TLC firmado entre Chile y Estados Unidos cuenta con 22 capítulos y varios anexos semejantes a otros tratados comerciales de última generación, constituyéndose en el quinto instrumento de estas características firmado por el país sudamericano.
Si bien para Estados Unidos la firma de este instrumento no reviste un significado fundamental al ser Chile el socio comercial número 37 de su economía, para Chile constituye una pieza clave en su estrategia de posicionarse como una plataforma global de negocios e inversión.
El TLC Chile-Estados Unidos es un acuerdo integral, que incluye todos los aspectos de la relación económica bilateral, tales como el comercio de bienes, contratación pública, promoción y protección de inversiones, servicios transfronterizos y protección de los derechos de propiedad intelectual.
El instrumento incorpora también temas de la nueva economía, como son el comercio electrónico y las telecomunicaciones, y aborda materias de orden medioambiental y laboral, las que han ido tomando cada vez mayor relevancia en la relación económica entre los países.
El acuerdo estableció plazos de desgravación arancelaria de 2, 4, 6, 8 y 12 años para llegar al 1 de enero de 2015 con el 100 por ciento del comercio entre Chile y Estados Unidos completamente liberado.
Desde la entrada en vigor del TLC, 7.675 productos ya gozan de plena desgravación, alcanzando al 97,1 por ciento de la canasta exportadora del país.
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