por Juan Cristóbal Guarello¿Por qué Carlo de Gavardo tira el currículo para justificar el aporte estatal a su Hummer? Muy prepotente.
¿Sabrá que en Chile existen miles de artistas, intelectuales, profesionales, médicos, creadores y escritores mundialmente reconocidos que jamás han recibido un peso del Estado? Algunos hacen patria investigando la cura de enfermedades peligrosas o buscando nuevas tecnologías con fondos miserables. Ellos han visto un millón de dólares sólo en películas.
Que De Gavardo entienda. Nadie discute su condición de figura del deporte, y nadie cuestiona que gracias a él un porcentaje relevante de este Dakar está en Chile. Lo que uno se pregunta son las razones y el mecanismo que lo convirtieron en el deportista chileno en el que más se ha invertido en la historia. Según este diario, 300 mil dólares por día. ¿Fue un premio? Admítanlo entonces. ¿Fue como promoción turística? Muestren el proyecto. ¿Fue para que Chile ganara el Dakar pese a que el piloto apenas comienza a correr en auto? Dudoso. A la larga fue porque De Gavardo lo pidió, y como era De Gavardo le dieron el dinero. Ahora, si era tan rentable, ¿por qué la empresa privada no puso los recursos? ¿Les tiró el currículo a los empresarios cuando les fue a pedir dinero?
No pues, Carlo, el que se cuestione semejante gasto era previsible y, sobre todo, necesario. Aquí no funciona la lógica de “es porque soy yo”. Esto es una democracia. Si a Tomás González le pasan un millón de dólares para competir en gimnasia acrobática y queda eliminado a la primera de cambio, las dudas serían iguales. Como dice Serrat, “nunca es triste la verdad, lo que no tiene es remedio”.
Recuerdo a Patricio Sáez Godoy, campeón mundial de caza submarina hace cuatro años en Portugal. La historia es novelesca. Participó sin un peso y tuvo que mariscar en Europa para sustentar su competencia. Y les ganó a todos. Meses más tarde le entregaron un chequecito de once millones, con los que pagó las cuentas y alimentó a su familia. Y no le tiró el currículo en la cara a nadie.
ENCUENTRO RAZONABLE LA CRÍTICA DE ESTE TIPO, PERO POR DIOS QUE ME CAE MAL.. ADEMÁS NO TIENE QUE TRATAR A NADIE DE PEDANTE, SI EL MISMO ES SUPER PEDANTE..
ResponderBorrarADEMÁS ES UNA VIEJA CHISMOSA, TODAVÍA RECUERDO CUANDO IBA AL TYC DE ARGENTINA, A PELAR AL FUTBOL NACIONAL ALLÁ... COMO UN LAMECULO.
ADEMÁS ES SUPER CONFLICTIVO Y LO ECHAN DE TODAS PARTES.
tomar las palabras de este tipo. naa para que. no existe guarello, ni en su familia. de futbol ni idea que haga un analisis de un partido de futbol le queda grande.
ResponderBorrary lo de gavardo fue una apuesta en un deporte que es imprevisible como es el dakar por parte del gobierno. habria que analisar mas en profundida aquello.o acaso se tenia considerado de ante que el piloto italiano iva a accidentarse ahhhhh
Existe un dicho que tal vez se acomoda a esta situacion, "La culpa no es del cerdo, sino del que le da el afrecho". Para mi culpas compartidas, el gobierno por entregar recursos como una medida marketera, para que se vea el aporte al deporte nacional, sin importar el curriculum ( me refiero a experiencia en moto y no en auto)y la de Gavardo de meterse en camisa de once varas, pidiendo un aporte a la moneda, pero sin el compromiso de aportar con un resultado.
ResponderBorrarEn resumen todo light, y aqui no pasa nada.
ejemplo de idiota, si el gobierno no entrega dinero a los deportistas es malo ahora si lo entrega es malo tambien tal vez las razones porque se le entrego el dinero son questionables pero discutir la calidad de deportista de degavardo es absurdo si fuese porque paso de las motos a los autos nadie le hubiese prestado ropa a peterhansel que paso de las motos a los autos y gano.
ResponderBorrarEsto sienta un precedente peligroso. En esta ocasión el aporte estatal a un deportista destacado ha quedado manchado por críticas de todo tipo, pero que han sido posteriores al fracaso de DeGavardo. Esta misma columna de Guarello hubiera sido un aporte si la hubiera hecho cuando se asignaron los recursos, no ahora, que hace leña del arbol caído.
ResponderBorrarLo peligroso del precedente está en que a la próxima vez que un deportista requira un aporte especial, todo el mundo le va a enrostrar este caso en la cara.
Cortemos con el chaqueteo, si DeGavardo hubiera ido bien en el Dakar, todos estarían felicitando al gobierno por la apuesta.
Además, vale aclarar que el dinero vino de Sernatur, no Chiledeportes. Fue un gasto en publicidad, no de naturaleza deportiva.
ResponderBorrarPuede ser cuestionable la decisión, pero hay desinformación al decir que se pudo asignar a otros deportistas, o para construir casas.