Un punto alto en la economía nacional no sólo es la reconstrucción, sino también el consumo que ha tenido un desempeño alto en los últimos meses, por lo que se espera que al cierre del presente año, muestre un crecimiento cercano al 10%, lo que se espera mantener hasta finalizado el primer semestre de 2011, siendo la principal ayuda el actual valor del tipo de cambio, que ayer cerró en $482 y que impulsa la demanda.
Para Ricardo Matte, director del programa económico de Libertad y Desarrollo, señaló que “el consumo total será de un 9% al cierre del presente año, tomando en cuenta que está formado por bienes durables y no durables, tomando en cuenta que la gente se encuentra optimista”.
Asimismo sostuvo que “seguiremos viendo cifras nuevas hasta el primer semestre del próximo año, que tendrá ritmos más exigentes acontar de agosto. Además el valor del tipo de cambio provoca atractivo, lo que se traspasa en distintas áreas”.
Opinión similar posee Alejandro Fernández, socio de Gemines consultores, quien indicó que “seguirá creciendo fuerte, pero tal vez un poco menos, pero lo importante es ver cómo se comporta la demanda de mes a mes. Además el crecimiento del empleo y de las remuneraciones están financiando la expansión del consumo”.
El economista agregó que “los recursos estarán presentes y las expectativas han mejorado mucho, por lo que el consumo estará en torno a 9%, lo que se mantendría el primer semestre del próximo año”.
Por último para Juan Eduardo Coeymans de la Pontificia Universidad Católica “seguirá fuerte y como el tipo de cambio está fuerte hay un componente importado de consumo que terminará creciendo más que el producto”.
“El alza rozará los dos dígitos, pero el consumo y la inversión son los que están estirando el crecimiento del PIB. De hecho han compensado la baja de las propias exportaciones”, dijo el economista.
Acumular reservas
Por otra parte ayer el Grupo de Política Monetaria (GPM) recomendó al Banco Central (BC) subir la tasa de los actuales 2,75% a un 3%, para la reunión del Consejo que se efectuará hoy. Los principales argumentos que dieron los expertos es que las brechas de capacidad se están cerrando relativamente rápido y que la política monetaria actúa con rezagos de varios meses sobre la demanda.
Sin embargo, ante la consulta si intervenir o no el BC ante la caída del tipo de cambio, existió coincidencia que sería efectivo, pero cuando la divisa norteamericana se encontrara en valores de $460, porque ahora en $480 no sería muy efectivo.
“Una intervención podría se más efectiva bajo los $470, tomando en cuenta que serviría para acumular mayores reservas, debido a que Chile tiene poco en comparación a otros países y ante futuras crisis es bueno tener recursos”, enfatizó Fernández.
En este sentido, Coeymans indicó que “hay que tener reservas por que el colchón que se tiene actualmente es debido al tipo de cambio flexible que posee Chile”.
No obstante coincidieron que depende de la velocidad de la caída el momento en que el BC debiera intervenir, por lo que si el instituto emisor no sube la tasa hoy dijeron que se podría deber a que la economía nacional puede estar más “trancada” de lo que considera el mercado.
Por último Fernández afirmó que el país “debe estar preparado para una futura crisis de un país emergente, que podría ser Brasil, porque sus fundamentos no son tan sólidos”.
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