Nota: Es vergonzoso que un país con tanto potencial para producir alimentos, tenga a sus niños muriéndose de hambre... efectos de la corrupción y las malas políticas económicas. No hay que olvidar que Argentina llegó a ser considerada un país desarrollado. Una lección para aprender cuando se nos ofrecen soluciones populistas o se evita tomar decisiones impopulares que podrían ser beneficiosas en el largo plazo.
Una prestigiosa institución sobre nutrición de nuestro país (Argentina) disertó sobre las problemáticas que atañen a los infantes. La desnutrición, el hambre y el sobrepeso están a la cabeza. Para resolverlos, aseguran, hay que cambiar hábitos de vida.
Son gravísimos, y se perciben a simple vista. Requieren soluciones urgentes, pero pensadas a largo plazo. Son los problemas nutricionales de la infancia en el mundo. Por supuesto, la Argentina no es una isla, y en este tema, como en tantos otros, comparte la realidad con el resto de los países. Precisamente sobre esta problemática se brindó ayer una conferencia desde el Centro de Estudios sobre Nutrición Infantil (Cesni), con motivo de la designación del doctor Esteban Carmuega como su nuevo director, que formó parte de la dirección del Cesni durante 17 años. En la ocasión, el especialista se refirió a los grandes problemas nutricionales de la niñez en nuestro país, y a las líneas de acción que permitirán darles una mejor respuesta.
Dos grandes problemas
En diálogo con Hoy, el doctor Carmuega señaló como el problema nutricional por excelencia de los infantes argentinos “todos aquellos que afectan el ciclo vital, desde la concepción hasta los dos años de vida”. “Son enfermedades que reciben distintos nombres, y que luego se arrastran durante toda la vida”, enfatizó el especialista, y agregó que “el segundo gran problema, que se inicia justamente cuando termina el anterior, es el de la obesidad infantil, que se extiende a nivel mundial”. Y la cifra que grafica esta cuestión es alarmante: la cuarta parte de los adolescentes argentinos tienen sobrepeso, según el especialista, que habló de una “epidemia que crece cada vez más, y que responde al desbalance crónico que hay entre una menor actividad física y una alta densidad calórica en los alimentos que se consumen”. A su vez, explicó que cada una de las dos situaciones mencionadas responden a múltiples factores y hábitos, entre ellos una reducción del tiempo del ocio con respecto a épocas pasadas, un menor gasto de energía y de consumo de frutas y verduras, alimentos que contienen cada vez más azúcar, y muchos otros.
Ante la consulta sobre la situación del resto de los países de América Latina, Carmuega señaló que toda la región está pasando por lo que se conoce como “transición nutricional”, un período que cada país atraviesa en un estadío distinto. “Al igual que Chile y Uruguay, en Argentina se registra menor mortalidad infantil, pero un aumento de los casos de desnutrición crónica y anemia, aunque en este último punto tenemos una enorme diferencia con Chile”, expresó el profesional, y especificó que, mientras en el vecino país sólo el 5% de los niños presenta anemia, aquí se ve afectado un tercio de los infantes.
Estimular hábitos
Durante la conferencia, el doctor Carmuega hizo especial hincapié en la necesidad de diferenciar entre hambre y desnutrición. En ese sentido, explicó que el hambre es la falta de comida y, por lo tanto, se resuelve con el suministro de la misma. Cabe mencionar que la hambruna se cobra 17 mil vidas diarias en todo el mundo.
En nuestro país son muchas las familias que pasan hambre, situación que no tiene justificación alguna, teniendo en cuenta que Argentina tiene un saldo neto exportador de alimentos en el que la disponibilidad promedio de energía es mayor de 3.200 Kcal/día.
“Hambre y desnutrición no son sinónimos y es riesgoso confundirlos, porque puede conducir a pensar que la desnutrición se resuelve con más comida. La desnutrición infantil es la condena que les impone la sociedad a los niños al limitar su derecho de ser todo aquello que hubieran podido ser”, precisó Carmuega durante la conferencia, y continuó: “La desnutrición se resuelve comprendiendo las necesidades particulares de cada etapa del ciclo vital, estimulando prácticas de crianza que promuevan un mejor crecimiento y desarrollo, asegurando una alimentación adecuada para mujeres en edad fértil, embarazadas, nodrizas y niños”.
Con respecto a las cifras que ilustran la problemática, el especialista señaló que cada año nacen 50 mil niños con bajo peso y alrededor de 174 con un peso que la OMS considera insuficiente. Nacer con un peso inadecuado implica no sólo perder masa corporal (alrededor de 5 cm de altura final, 5 kg de fuerza en las manos, 5 puntos menos en el cociente intelectual promedio), sino también perder la flexibilidad de adaptación de nuestro metabolismo, lo que nos expone a un riesgo 50% mayor de padecer enfermedades crónicas en la vida adulta, las mismas que hoy representan una pesada carga para nuestros desbordados sistemas de salud (diabetes, enfermedad cerebrovascular, hipertensión, enfermedad cardiovascular).
El bajo peso de la madre al inicio del embarazo, su mal progreso y el fumar -todas causas prevenibles con un adecuado control prenatal- explican la mitad del riesgo de que un niño tenga bajo peso al nacer.
A nivel de todo el país, el promedio del peso de nacimiento descendió más de 30 gramos en la última década. Nacer con bajo peso es una de las principales causas de no crecer bien en la primera infancia. A este fenómeno se lo denomina desnutrición crónica y, si bien se mide como un retraso en la talla, debería entenderse como la cicatriz en el crecimiento que deja la falla de una adecuada nutrición temprana.
La institución
El Cesni es una entidad de extensa trayectoria en nuestro país en el campo de la investigación y docencia en nutrición infantil. En sus 33 años de vida, ha evolucionado a medida que la problemática nutricional en la niñez se mudó de los hospitales hacia la comunidad.
Las líneas de investigación con las que la institución se rige son: pobreza y desnutrición infantil; deficiencias de micronutrientes que comprometen el crecimiento y desarrollo de los niños; obesidad y factores de riesgo en la infancia; intervenciones efectivas a lo largo del ciclo vital; y macro y microeconomía de la alimentación.
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ACLARACION: Este blog no es antiperuano ni nacionalista chileno. Este blog simplemente recopila y (a veces) comenta sobre artículos recopilados en la prensa nacional y mundial y que involucran a Chile. Si parece "cargado" hacia Perú, simplemente, es resultado de la publicación constante -y obsesiva- en ese país de artículos en que se relaciona a Chile. Así también, como ejemplo opuesto, no aparecen articulos argentinos, simplemente, porque en ese país no se publican notas frecuentes respecto Chile. Este blog también publica -de vez en cuando- artículos (peruanos o de medios internacionales) para desmitificar ciertas creencias peruanas -promovidas por medios de comunicación y políticos populistas de ese país- sobre que Perú ha superado el desarrollo chileno, lo que es usado en ese país para asegurar que Chile envidia a Perú y que por eso buscaría perjudicarlo. Es decir, se usa el mito de la superación peruana y la envidia, para incitar el odio antichileno en Perú.
MAL DE OTROS, CONSUELO DE TONTOS.
ResponderBorrarMAL DE OTROS, SEÑALES DE ALERTA
ResponderBorrarMAL DE OTROS, CONSUELO DE TONTOS.
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No puedes pensar de ese modo, Chile no se consuela ni se complace con la desgracia ajena, mas bien se conmueve por la actual situacion del pueblo argentino.
Ojala Argentina recupere pronto su antiguo esplendor y su dinamica economica, como siempre repito para ver si a los peruanos "les queda claro" a Chile le conviene que todo el "vecindario" progrese, Chile no va avanzar mas o mas rapido si a los vecinos les va mal, todo lo contrario necesitavos socios fuertes para crecer y competir en primera division.
Es valido el ejemplo; hoy por hoy, y con lo neuroticos q somos, estamos mas preocupados de no perder lo q se ha hecho q por las cosas que faltan aun por hacer. Nadie se alegra, ni "consuela", con los problemas de otros, en este caso de argentina. Pero es verdad que se deben tomar lecciones de estosasuntos. Ademas argentina sigue teniendo enormes virtudes.
ResponderBorrarMe huele al peruano esquizofrenico el primer comentario.
SOLO UN PERUANO SE RIE Y MOFA DE LA DESGRACIA AJENA...
ResponderBorrarESPERO QUE PRONTO ARGENTINA RENAZCA, COMO LO FUE ANTAÑO, JUNTOS (CHILE-ARGENTINA) ESTAN DESTINADOS A DEFENDER JUNTOS, SUS INTERESES, Y QUE ARGENTINA SEA FUERTE, HACE QUE CHILE TENGA UN PARTNER A SU ALTURA.
VAMOS ARGENTINA!!!!
Hoy es "Cruz del Sur"
ResponderBorrarMañana la hermandad que tanto tiempo se buscó.
Ojala argentina se recupere, empezando por sacar a sus autoridades corruptas e ineptas, como las peruanas.
Lo que pasa es que en la Argentina hay muchas madres jóvenes (entre 14 y 15 años) que no se cuidan durante el embarazo(fuman,beben), además muchas mujeres tienen hijos nada más que para cobrar el subsidio que les da el gobierno por tener más de 8 hijos.
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