
Obama quedó deslumbrado tras contemplar por unos segundos las nalgas de la mujer, a quien nunca le miró el rostro.
La joven muy bien proporcionada es una asistente del presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula Da Silva. El hecho ocurrió antes de que los mandatarios reunidos se vayan a tomar una fotografía.
Muy cerca de Obama, se encontraba el presidente de Francia, Nicolás Sarkozy, quien sonrió tras darse cuenta del hecho.

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