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domingo, noviembre 21, 2010

Los empresarios más jóvenes de Chile

Administran, se relacionan con los proveedores, venden, llevan registros de contabilidad y deciden inversiones. Su fin no es lucro, sino la solidaridad. Y ni siquiera tienen la mayoría edad. Son los estudiantes que integran las cooperativas escolares, las que buscan demostrar que los niños también pueden emprender, que otra economía es posible.

Carla Bahamondes está a cargo de un negocio. Es la directora de Gastromar, que vende materias primas para gastronomía y banquetería: harina, huevos, aceite, carne, pollo, mariscos, artículos para la decoración de tortas, entre decenas de otros productos. Les ha ido bien, tanto que en el último año hicieron algunas inversiones que sin este negocio no podrían haber efectuado.

Con seguridad se podría afirmar que Carla es una de las comerciantes más jóvenes de Chile. Aún no cumple ni siquiera los 18 años. Sus socios tampoco son mayores de edad. De hecho, todos están todavía cursando la enseñanza media en el Liceo Marítimo de Valparaíso.

El modelo bajo el que desarrollan este negocio es el de las cooperativas escolares. Es un esquema que se desarrolló en Chile con fuerza hace algunas décadas, y hoy ha vuelto a ser promovido. ¿El resultado? Cerca de 25 cooperativas se desarrollan al interior de escuelas y liceos a lo largo de todo el país. Es un número que puede parecer pequeño, pero demuestra que es un modelo factible y rentable.

Su esquema es parecido al de las grandes cooperativas que funcionan en Chile, como Colún, Capel y Coopeuch, pero adaptadas a la realidad escolar y de sus jóvenes asociados. El director del Centro Internacional de Economía Social y Cooperativas (Ciescoop), de la Universidad de Santiago, Mario Radrigán, explica que la Ley General de Cooperativas tiene un apartado especial que las reconoce como una modalidad específica, al igual que a las cooperativas agrícolas, de vivienda y de ahorro y crédito.

Revival cooperativo

En la década de los 60 y hasta mediados de los ’70, el cooperativismo escolar fue un modelo que se promovió en las escuelas chilenas. Radrigán cuenta que entonces su promoción fue liderada por el Estado, específicamente por el Ministerio de Educación. También se sumaron a esa labor grandes cooperativas del momento, como Sodimac, que a través de un convenio con el Mineduc apoyó el surgimiento de este modelo.

“Eso ayudó bastante, porque en ese minuto Sodimac era una cooperativa muy importante, que apoyó la formación de docentes, la generación de manuales, la realización de encuentros nacionales y provinciales, así que su aporte fue grande”, precisa el director del Ciescoop.

A mediados de los ’70 esa labor de promoción se detuvo y recién se retomó casi 30 años después, a fines de los ’90. Desde entonces esa tarea se realizó desde la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Chile y desde este año desde el Ciescoop de la USACh, pero prácticamente con los mismos profesionales.

Es así como con este revival ya se han creado 25 cooperativas escolares, que operan en igual cantidad de establecimientos educacionales de cinco regiones. En Antofagasta funcionan 10 cooperativas, que han sido apoyadas por la Fundación Minera Escondida, institución que desde 2008 asumió la responsabilidad de promover este modelo en tres comunas de la región: Antofagasta, Mejillones y San Pedro de Atacama.

Las 15 restantes operan en las regiones de Atacama, Valparaíso, Metropolitana y el Maule. En este caso su surgimiento ha sido apoyado por Coopeuch, una de las cooperativas de ahorro y crédito más reconocidas del país. Su gerente general, Siria Jeldes, explica que desde 1998 realizan el programa “Cooperativas Escolares”, que tiene como fin que “niños y jóvenes vivan de cerca la experiencia de una empresa cooperativa para fomentar en ellos la creación de emprendimientos. De este modo, estamos buscando que las generaciones futuras puedan aplicar en su vida personal y profesional los principios cooperativos, como la solidaridad, la democracia, la ayuda a los demás y el trabajo en equipo”. El apoyo se concreta entregando el financiamiento y capital semilla para la formación, asistencia y capacitación.

Trabajo solidario

Cuando se habla de cooperativas no se habla de un negocio común y corriente. Ellas no buscan el lucro, sino promover la solidaridad, con la convicción de que una economía más humana es posible. Estas empresas cooperativas tienen un fuerte contenido social y ético y están basadas en la ayuda mutua.

Son principios que se aplican también a las cooperativas escolares, donde los estudiantes desarrollan un negocio cuyas ganancias se convierten en inversiones que van en directo beneficio de toda la comunidad escolar.

En su organización, también tienen ciertas particularidades que las distinguen de un negocio común y corriente. De partida, tienen un carácter democrático y son los propios alumnos-cooperados quienes toman todas las decisiones, desde la iniciativa que quieren desarrollar hasta en qué se invierten las ganancias. Para ello cuentan con el apoyo de un profesor asesor, quien en la mayoría de los casos se convierte en el principal respaldo para los estudiantes que trabajan en el proyecto. Además, la Ley de Cooperativas Escolares faculta a los menores de 18 años a formar parte de una sociedad, siempre y cuando sean autorizados por un mayor de edad. Y por su naturaleza, las cooperativas que operan en las escuelas tampoco pagan impuestos.

El Ciescoop de la USACh funciona como una especie de patrulla: cada vez que un colegio quiere conocer el modelo para implementarlo en su establecimiento, ahí están sus profesionales prestando asesoría. “En la medida que se recepciona un interés por parte de un colegio o un municipio desarrollamos una actividad de formación dirigida a los profesores, que harán de asesores de la cooperativa, y también al equipo gestor de estudiantes. Nosotros les entregamos las técnicas, la asesoría jurídica para constituirse formalmente y después hacemos un acompañamiento a través del tiempo”, explica Radrigán. Eso se complementa con una formación de gestión, en donde se les enseña a desarrollar un proyecto, a planificar y también a administrar conflictos.

Según Radrigán, “la idea es promover el trabajo en equipo, de manera que aprendan a trabajar en conjunto y a resolver sus diferencias sin que eso signifique quiebres o descalificaciones, y ese es un trabajo importante. Son habilidades duras, que los van a acompañar durante toda su vida, porque las aprendieron en la práctica. Además, insistimos en que éstas sean iniciativas en que los objetivos y los propósitos sean definidos por los propios estudiantes y estén lo más cerca posible de un modelo de autogestión, porque eso asegura que responda a una necesidad y a algo que sea sentido por el propio grupo y no algo impuesto o por dinero”.

Cuenta el director del Ciescoop que muchos de los que pasan por cooperativas escolares quedan con el bichito y con ganas de emprender sus propios negocios una vez que salen del colegio. Y la gerente general de Coopeuch agrega que “constituyen una herramienta de formación y desarrollo para crear el espíritu de emprendimiento en los jóvenes. Esto se traduce en una oportunidad para su futuro, ya que permite que vean en sus propias capacidades y empuje una forma de lograr objetivos que les representen movilidad social y logros que apunten a tener mejores condiciones en sus vidas”.


EL SÚPER LICEO MARÍTIMO

En el Liceo Marítimo de Valparaíso se enteraron hace 10 años de las cooperativas escolares. Y decidieron crear una. ¿Qué negocio hacer? Miraron a su alrededor y vieron que los alumnos de la especialidad de gastronomía requerían en forma permanente muchos materiales para sus clases. Ahí había una oportunidad.

Fue así como en 2000 nació el quiosco de la Cooperativa Gastromar, que provee de todas las materias primas a los alumnos de gastronomía: pescados, mariscos, carne, aceite, huevos y cientos de productos más. Y como para abastecerse compran al por mayor, venden todo a precio más convenientes que fuera del liceo.

Los socios son los 240 alumnos 3° y 4° medio de la especialidad, pero los inscritos y que participan activamente son 12. Son ellos los que hacen las compras, envasan, venden y llevan la contabilidad. “Si para el taller de mañana los alumnos necesitan machas, las encargan al quiosco y los socios las van a comprar”, explica Olga Olivares, la profesora que los asesora. Las ganancias las invierten en necesidades de la carrera. Este año, por ejemplo, donaron $500.000, con lo que se compraron una batidora semi industrial y moldes. Antes ya habían invertido en un congelador, una pesa electrónica, una selladora y elementos para el bar. Además, a fin de año cada uno de los socios recibió un pendrive de regalo.

“Compartir es algo súper importante que hemos desarrollado, además de ser solidarios y empáticos. A veces se necesita mucha paciencia para entender al otro y la cooperativa nos ayuda a potenciar eso”, asegura Carla Bahamondes, quien está en 4° año y es la directora de la Cooperativa Gastromar. Tan entusiasmada está, que cuando salga del liceo le gustaría emprender e instalar su propio negocio.


EL BAZAR DE LOS NIÑOS

En pleno centro de Santiago se encuentra el Liceo República de Israel. El establecimiento fue uno de los que enganchó con el modelo de las cooperativas y desde hace un par de años comenzaron a operar un bazar en el que alumnos encuentran todos los productos escolares que necesitan: lápices, cuadernos, block, cartulina, papel lustre y muchas cosas más.

Detrás del mesón hay vendedores pequeños: los socios de la cooperativa -son 65, pero alrededor de 50 participan activamente- cursan entre 4° y 8° básico y son ellos quienes administran todo el negocio, asesorados eso sí por la profesora Olga Suazo. “Es una instancia de participación en la que se crea un sentido de solidaridad y cooperación. Más que estar peleando, ellos están socializando. Mientras el resto de los alumnos prefieren jugar, ellos sacrifican sus recreos atendiendo el bazar”, cuenta la profesora.

Como son emprendedores muy pequeños, muchas veces se les hace pesado el trabajo, sobre todo por los turnos y el registro de la contabilidad. Pero ahí están los profesores asesores apoyando, porque de eso se trata, de solidaridad.


LOS PIONEROS

La cooperativa del Colegio República de Ecuador fue una de las primeras en crearse en este revival. El profesor monitor Hernán Aguillón cuenta que en 1999 participaron en una capacitación y ya en 2000 la cooperativa estaba funcionando. ¿Su proyecto? Un bazar en que las alumnas del colegio encuentran no sólo materiales escolares, sino también artículos que a las niñas les encantan, como aros y adornos.

Son alumnas de 4° y 5° básico las que integran la cooperativa y las que la administran prácticamente solas. “Yo de vez en cuando voy, pero ellas asumen la responsabilidad de mantener todo en orden.

Tan bien les ha ido que en estos diez años han tenido ganancias que les permitieron comprar una fotocopiadora, que ofrece servicios a menor precio para la escuela. “Me llena de orgullo ver que al comienzo no se desenvuelven bien y después van aprendiendo y lo hacen súper bien, Incluso, tenemos ex alumnas que han seguido con negocios propios”, cuenta satisfecho el profesor.

Artículo original

3 comentarios:

  1. Anónimo8:16 p.m.

    CONSPIRACION SALFATE : Cuidado" caperucitas rojas ", a cuidarse del " lobo feroz " empresario , que gobierna Chile.

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  2. Anónimo8:20 p.m.

    COMO ES POSIBLE, NIÑOS SIENDO EMPRENDEDORES, EN DE ESTAR DONDE DEBEN , APRENDIENDO A SER TONTOS UTILES DE LOS SOCIALISTAS Y COMUNISTAS

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  3. Anónimo8:22 p.m.

    conspiracion saco de weas, la culpa la tiene pinocho, que no fue lo suficientemente hombre como para hacer desaparecer la lacra de izquierda

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ACLARACION: Este blog no es antiperuano ni nacionalista chileno. Este blog simplemente recopila y (a veces) comenta sobre artículos recopilados en la prensa nacional y mundial y que involucran a Chile. Si parece "cargado" hacia Perú, simplemente, es resultado de la publicación constante -y obsesiva- en ese país de artículos en que se relaciona a Chile. Así también, como ejemplo opuesto, no aparecen articulos argentinos, simplemente, porque en ese país no se publican notas frecuentes respecto Chile. Este blog también publica -de vez en cuando- artículos (peruanos o de medios internacionales) para desmitificar ciertas creencias peruanas -promovidas por medios de comunicación y políticos populistas de ese país- sobre que Perú ha superado el desarrollo chileno, lo que es usado en ese país para asegurar que Chile envidia a Perú y que por eso buscaría perjudicarlo. Es decir, se usa el mito de la superación peruana y la envidia, para incitar el odio antichileno en Perú.