Washington. El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, declaró ayer que aspira a establecer con toda América latina el tipo de relaciones basadas en el respeto mutuo que mantiene con Chile y Brasil. Además, puso como ejemplo a estos dos países en manejo económico y políticas de desarrollo.
Obama hizo estas declaraciones en ocasión de recibir a su par chilena, Michelle Bachelet, y definirla como uno de los mejores líderes de América latina.
Del encuentro en Washington surgió, según relató la misma presidenta, la posibilidad de una pronta visita de Obama a la región, en procura de continuar su política de acercamiento y cooperación con los países del Cono Sur.
En una conferencia de prensa, Obama recordó las diferencias ideológicas que separan a su gobierno del chileno, que “no concuerda con la política exterior estadounidense en todos y cada uno de los temas”, o del brasileño, liderado por una persona “percibida como un fuerte izquierdista” en Estados Unidos, indicó.
Pero aún así, añadió rápidamente, Washington logró un tipo de cooperación con Santiago o Brasilia que es el modelo que, aseveró, desearía aplicar al resto de la región.
Tras las elogiosas referencias de Obama y luego del encuentro, la presidenta de Chile resaltó que advierte “con mucha alegría la importancia que Obama da a la región y particularmente a Chile”.
Sin embargo, Obama prefirió no pronunciarse sobre la necesidad de expresar disculpas a Chile por la intervención de la CIA en el golpe militar de 1973 que instauró la sangrienta de Augusto Pinochet. El mandatario prefirió decir que hay que “mirar hacia el futuro” en las relaciones con ese país.
Artículo original
No hay comentarios.:
Publicar un comentario